INVENTO ENTRERRIANO: LUZ ULTRAVIOLETA PARA COMBATIR EL CORONAVIRUS YA SE UTILIZA EN ARGENTINA.

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En medio de la emergencia por la pandemia, bioingenieros de la ciudad de Paraná desarrollaron un equipo por luz UV germicida que mata el 99% de los virus, bacterias y hongos que pueden estar en el aire y superficies. Hoy ya está siendo utilizado por instituciones de salud en Argentina.

En la batalla contra la pandemia del coronavirus -Covid-19-, la desinfección juega un papel clave. Hace apenas poco más de dos meses en China, que es el país donde nació esta nueva enfermedad causada por el SARS-CoV-2, se comenzó a utilizar luz ultravioleta germicida para matar al virus en ambientes. En ese momento, bioingenieros entrerrianos comenzaron a trabajar en una versión local de un sistema que permita este tipo de esterilización. En tiempo récord ya estaban entregando el primer equipo, al que llamaron Lumi, en un hospital. Hoy ya son 9 los que están en funcionamiento en el país para combatir al coronavirus.

Santiago Romero Ayala es uno de los creadores de este sistema de desinfección por luz ultravioleta germicida. Junto a Sebastián Ili Flores desarrollaron la adaptación de estas lámparas que son una tecnología que ya se utilizaba hace tiempo en la industria alimenticia y médica en sistemas de ventilación o campanas de laboratorios para desinfección, pero lo novedoso fue que las ubicaron en una estructura vertical y portátil que permite ser utilizada en espacios más amplios

“De esta manera logramos desinfectar el aire y las superficies a donde irradia la luz y disminuir la carga viral a la que van a estar expuestos el personal de salud o cualquier persona que ingresa a una habitación que ha sido expuesta al virus”, explicó Romero Ayala .

El especialista aseguró que la luz ultravioleta germicida utilizada en los equipos, deja al coronavirus inocuo, incapaz de reproducirse y genera una desinfección del 99% alrededor de dos metros en 10 minutos para la versión Lumi 19; y de tres metros en 7 minutos en la versión Lumi 20 que es un equipo más grande.

Con esa misma efectividad puede eliminar una variedad amplia de microorganismos -virus, bacterias y hongos- aunque aclaran que no remplaza a la desinfección tradicional, pero la complementa y la hace más efectiva.

“El Lumi desinfecta superficies que uno no está acostumbrado a limpiar. La ventaja de este sistema es que donde llega la luz desinfecta y todo el espacio donde irradiamos está siendo desinfectado, incluso el aire”, destacó el egresado de la universidad pública.

La creación de Lumi se realizó en tiempo récord. En solo 40 días los bioingenieros y los desarrolladores de la estructura, Claudio y Fabián Cerrudo de Metalcerr, lograron con una primera idea bosquejar un prototipo, construir el producto, probarlo e iniciar su producción para comercialización. “Pasamos de la idea a un producto ya vendible en tan poco tiempo. Es lo que todos quieren hacer. Las metodologías ágiles con las que se ha llegado hace mucho tiempo y que es difícil de implementar en Argentina pero hemos demostrado que se puede”, dijo Romero Ayala.

Hoy ya son nueve los Lumi que están en funcionamiento en el país. Y si bien el bioingeniero explicó que en este tiempo han surgido muchos de estos proyectos a partir de convocatorias de innovación y tecnología en la emergencia, “el único que tiene un producto final vendible y que ya está en varios hospitales es el nuestro”, sentenció Romero Ayala.

“Es un gran orgullo porque desde la ciudad de Paraná logramos llegar a Jujuy, Buenos Aires, tenemos consultas de Tierra del Fuego, en Entre Ríos tenemos varios equipos ya instalados. Y en Santa Fe tenemos contacto con Glocalcon que es una empresa que nos representa aquí y va a comercializar nuestros productos y es una gran alianza que hemos logrado en muy corto plazo”, detalló.

¿Cómo funciona? Como la luz que utiliza en Lumi (UVC) es nociva para la piel y los ojos, y según indicó el especialista a larga exposición puede ser cancerígena y provocar lesiones oculares, diseñaron un sistema de encendido manual con tiempo de escape y otro remoto. “Cuenta con un sistema electrónico que le da inteligencia a este sistema para proteger sobre todo a los usuarios”, indicó Romero Ayala.

Por una lado cuenta con un encendido por botón, que al activarlo comienza un conteo sonoro de 30 segundos que permite a la persona salir del lugar. Pero también se puede prender, pausar y apagar con un celular utilizando una conexión wifi. Además el equipo tiene asociados sensores de movimiento que al registrar que alguien entra a la habitación en la que se está realizando la desinfección se interrumpen el proceso y se apaga.

El bioingeniero y creador de Lumi, está seguro que esta tecnología llegó para quedarse en la batalla contra la pandemia. “Para nosotros es una herramienta que suma muchísimo a lo que va a ser la desinfección de este virus que nos ha agarrado a todos por sorpresa y que se sigue investigando. Este tipo de herramientas es una defensa más que tenemos”, sostuvo.